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28.11.13

Correr es otro de mis pasatiempos. Lo hago desde la secundaria, cuando no significaba castigo alguno del profesor de deportes en turno. Recuerdo que en la prepa, me fui a segunda vuelta de Educación Física por no usar el canijo short. El examen consistió en correr 45 minutos. Para mí, que en ese entonces corría cada sábado con mi papá alrededor de una hora, no fue ningún problema. Me entrenaba en el Naucalli, en el camellón de Arboledas, en las canchas de Balcones, en el patio de la escuela o en la caminadora de mis papás. 

Mi primera carrera de 10 km, fue en Reforma, junto con mi papá y mi entonces novio y ahora esposo. La disfruté como nada en el mundo: los gritos de la gente, el jadeo de los pares, la música de los patrocinadores, el golpear de los tenis en el suelo: una marcha casi silenciosa hacia la meta. Es toda una fiesta, una experiencia que toda persona debería tener por lo menos una vez en la vida. 

¿Anécdotas? Muchas. ¿La más chistosa? Cuando me inscribí en la terna de 10 km de una famosa marca de cosméticos en el 2009, si mi memoria no me falla, y alentada por mi nutrióloga, desayuné un sandwich, un plátano y un café. Mi meta era el primer Sanirent a la vista o, en su defecto y el mejor de los casos, el baño de mi casa. ¡Craso error! #nolohagas

Tengo muy buenos recuerdos de las varias carreras que he completado: en una reciente titulada Rock & Run, mi inspiración era huir de un señor del cual no lograba separarme porque traía una pequeña bocina a todo volumen con música de Earth, Wind & Fire. No, gracias.

En general, no soporto correr con música. Me gusta escuchar mi respiración, concentrarme en mi ritmo, escuchar mi corazón. Literal. Espero algún día correr con mis hijos y mi hermoso compañero de vida. Qué sean partícipes de cómo suelo llegar a la meta llorando pero feliz de ver el camino que dejé atrás.
 
¡Si nos vemos, así nos saludamos! Visita asdeporte.com

27.11.13

Todo suma


Si amamantas o no, 
si colechas o no,
si estás a favor de la circuncisión o no,
si vacunas a tus hijos o no,
si usas pañales de tela o no, 
si usas carriola o no,
si eres vegetariano o el fan número 1 de la carne, 
si vas al súper o a la Comer,
el porteo no te excluye.


Y si no te gusta portear, también eres bienvenida.

 


Miles de agradecimientos a todas las personas que se dejaron retratar. Un fuerte abrazo.

24.11.13

¿Algodón o lana?

Bandolera de Vatanai Tintagel 100% algodón
Todo depende. A mí me gusta el algodón porque "no hay pierde". Es fácil de cuidar, se puede lavar a máquina y meter a la secadora, es un material térmico y se doma con rapidez. Para lavarlo basta con echarlo a la lavadora sin suavizantes y con un poco de detergente líquido Roma o Foca (pues no contienen abrillantadores ópticos, perfumes ni otros mil químicos que solamente dañan las fibras); ponerlo a secar en el tendedero o a temperatura baja a media en la secadora y, opcionalmente, plancharlo con vapor o a temperatura media. Siempre revisa las recomendaciones del fabricante.

Sin embargo, las mezclas tienen un por qué y satisfacen necesidades específicas de porteo. La lana, por ejemplo, es ideal para lugares fríos y climas invernales; mientras que el lino es más fresco.

Cuando he tenido fulares de lana, ¡ufff! he quedado prendada de su hermosura, su brillo y de su forma de cargar. Tienen una elasticidad muy peculiar, son muy fáciles de manejar, tienen una textura grippy pero a la vez se amoldan como mantequilla y ofrecen un soporte distintivo. Son más calientes que el algodón, por lo que son ideales para lugares fríos y climas invernales. 
Oscha Strato Aequus: fular grueso y de gran peso, ideal para niños grandes.

¿Las desventajas? Por desgracia, las hay, pero pueden evitarse. Por un lado, es posible que provoquen reacciones alérgicas y son relativamente difíciles de cuidar, ya que requieren ciclo delicado o, a falta del mismo, lavarse a mano en tina grande con varios cambios de agua fría a tibia (la lana no soporta el calor); evitar centrifugarlo, frotarlo y agitarlo pues la lana puede encogerse o enfieltrarse (felting); se recomienda el uso de detergente líquido para fibras delicadas (Eucalan, por ejemplo, que se consigue en la tienda de estambres Crochet) y en ocasiones, acondicionador especial si está muy nuevo o rasposo (scratchy); y finalmente secar a temperatura baja o, si se lava a mano, presionarlo para eliminar la mayor cantidad de agua, envolverlo en toallas secas y caminar encima de él (¡es en serio!) y extenderlo sobre una superficie plana hasta que se seque (si lo lavas en la noche, para la mañana siguiente ya estará listo porque es un material que absorbe y elimina muy rápido la humedad). En casos poco comunes, tendrás que guardarlo en algún contenedor o incluso en el refrigerador si en tu casa tienes polillas o sus larvas porque, al parecer, la lana es una de sus botanas favoritas por ser un textil de origen animal. ¿Terminé por desanimarte? ¡Noooooooo! Ponerlo al sol de vez en cuando ayuda a destruir las larvas y a mantenerlo en buen estado como cualquier otra prenda de este material.

Ejemplo de fieltro de lana
En otras palabras, si los porteadores y el bebé no son alérgicos a la lana, si tienes tiempo para cuidarlo adecuadamente y no tienes problemas de polillas en casa, me agradecerás haberle dado la oportunidad a esta hermosa mezcla.
Fular Ellevill modelo Norweigan Style "Jack" con 50% lana y 50% algodón
Didymos Audrey (50% lana) Foto tomada de Alidover.com
Ejemplos de woolies reconocidos y muy queridos en el mundo del porteo: Didymos Teviot, Audrey, Stonegrey India, June Pfau; Oscha Strato Aequus, Roses Noel y Tree of Life Astraea (ToLA); la lana de Natibaby (como el modelo Grey Wool Swallows o los de la línea Japan) es conocida por ser muy suave y nada rasposa. La firma Diva Milano también ofrece fulares con 47% de lana de alta calidad, suave y de muy buen soporte.
Diva Milano Veneziano Rosa con lana
Oscha Roses Noel con lana. Foto tomada del sitio oficial.
Agradezco a Segan S y a su bebé la facilitación de la foto donde modelan el fular Oscha Strato Aequus. Thanks, mama! De igual forma, un beso y agradecimiento a Patricia Soriano y A por posar para mi lente.

Si tienes alguna duda o comentario sobre esta publicación, no dudes en escribirme o en acercarte a algún grupo de porteo como CargArte.

22.11.13

El parque de mi casa


Varias veces a la semana, visitamos el camellón de Jinetes, ya sea para correr, caminar o ir a los juegos. El ruido de los coches, el olor a comida, las risas y los gritos de los niños nos acompañan con alegría. Nos gusta ir en familia: echar a los chaparros por las resbaladillas o pasar horas al pie del columpio que se balancea incesantemente a petición de nuestros pequeños dictadores. Tras una larga estadía, visitar la tienda de animalitos: peces, tortugas, perros, patos y conejos. Los niños son inocentes; no ven nada de malo en las jaulas y en el comercio/trato cuestionable de esas pobres +kotas. ¿Un heladito? ¿Una pelí? ¿Una donita o un agua para refrescarnos? Y de nuevo "el eterno forcejeo" para regresar a casa. ¡Qué bonitos son los parques! Un espacio de la infancia al que siempre da gusto regresar.


Sleepy dust o la jerga del porteo

"Sorry, I'm a newbie. What's does sleepy dust mean?" 

Traducción: Lo siento, soy nueva en esto. ¿Qué significa sleepy dust? Traducción de la traducción: Me encanta la jerga del porteo, es todo un idioma que los iniciados o curiosos no entienden. Cada día en los grupos y foros de porteo se hace la misma pregunta 20 veces: ¿Qué significa HTF, ETF, HSA, ITF? ¿Qué es un unicorn wrap? ¿Por qué hay mamás que tienen permastash? ¿Fluffy mail? ¿Weft, warp y refill?

En fin, es todo un universo paralelo lleno de palabras, conceptos y un sinfín de abreviaturas. ¡Divertidísimo por cierto desde mi formación como traductora! He aquí una lista de términos y su significado en el contexto del porteo y de siglas que debes conocer para navegar sin problemas:

sleepy dust: polvos para dormir que otra familia ha añadido a un fular usado y que garantiza que tu cangurito se dormirá en cuanto lo envuelvas.

unicorn wrap: fular que buscas ansiosamente por cielo, mar y tierra con la esperanza de que será mágico y especial. Son aquellos fulares altamente codiciados porque se piensa que han sido confeccionados con pelo de unicornio y sangre de hadas. Muy chistoso. Lo malo es cuando estas ilusiones viajan repletas de desilusiones desde Holanda, Rusia u otros países exóticos según nuestro ideario personal.

boomerang wrap: fular que compras, vendes, vuelves a comprar, vuelves a vender, vuelves a comprar... ya sabes lo que sigue. Por lo general, son fáciles de conseguir y por eso no te apegas a ellos: sabes que los consigues cuando sea y donde sea.

fluffy mail: el tan esperado correo. En otras palabras, te harás amiguísima de tu cartero y de las chicas de la oficina postal: Angélica, Laura y Myriam serán tus grandes "cuatas". Gustavo, Armando y Primitivo siempre se preguntarán qué traen esos sobres pachones que vienen de California, Ontario, ¿Países Bajos?, Inglaterra, Francia. ¿Qué carajos le mandan a esta mujer? "Fírmele aquí, seño" y por dentro "¿le diré que me enseñe que hay adentro?". El esperadísimo fluffy mail cargado de expectativas, sorpresas y decepciones.

break in: la acción de "domar" la bestia; o sea, suavizar el fular, que se vuelva moldeable; que la canija bolsa de papas que te mandaron desde Alemania, algún día no muy lejano, se someta. Qué deje de tener textura de cartón y se transforme en esa mantita con la que te gusta cobijarte en el sillón. 

legacy wrap: el fular o los fulares que pretendes legar o heredar a tus hijos, sobrinos o nietos. Por lo mismo, forman parte de tu colección permanente o permastash: aquélla que juras y perjuras que nunca venderás. Ja, ja y más ja. Es una palabra tabú. Nunca enuncies tu colección permanente porque es muuuuuuy probable que el día de mañana ya haya abandonado tu clóset.

Ninguna de estas bellezas vive en casa actualmente. Ups!
churner y hoarder: Churner es aquella porteadora que le gusta probar #todoslosfulares. No se conforma con uno, quiere tocarlos todos, jugar con todos. Ya vienen uno, ya se fue. Ya viene el otro, lo quiero vender. Hoarder, en cambio, es una acumuladora, una porteadora apegada a sus fulares. No le gusta venderlos por motivos sentimentales: "es que con ése le limpié el moquito el día de su cumpleaños número dos". O bien porque el mercado es taaaaan canijo que prefieren guardarlos antes que sufrir las consecuencias del swap.

swap o swamp: grupo de Facebook donde las mamás venden, compran e intercambian fulares, bandoleras, mochilas y otros portabebés ergonómicos. Es un deporte extremo: sacar el fular, revisarlo con lupa por aquello de las compradoras quisquillosas, lavarlo, medirlo con cinta y precisión, tomarse fotos buenas: con el bebé envuelto, estirado, con luz y sin luz, en compañía de otros fulares; publicarlo, morning bump, lunch bump, nap time bump; pending, payment plan, SOLD! o back again for sale. Búuu!

chicken out: echarse para atrás. Publicar un portabebé en el swap y arrepentirse. Hoarder! Chicken!

slubs, slubbies, nub, nubbies: pequeñas imperfecciones propias de cualquier tejido. Son muy comunes en los fulares tejidos a mano y en las mezclas de lino y cáñamo. En ocasiones son motivo de polémica y reclamos porque se suele pensar que pudieron ser causadas por el uso ((suspiro)).

action shot: foto que se toma de un fular en acción, con el bebé envuelto, para ver cómo viste, cómo se ve puesto.

stash: colección, pila de fulares. Puede ser minimalista o verdaderamente grande.

weft y warp o refill: Trama y urdimbre. Son los hilos que se entrelazan en un fular para crear el diseño final. El warp es la urdimbre o estructura principal del tejido; mientras que el weft o la trama se entreteje o ensarta a través de la urdimbre. Si observas detenidamente tu fular, el weft es ese hilo sútil que le da ese color o tono especial al resto del tejido. Su importancia radica en que hay modelos distintos para un mismo fular debido al weft. Por ejemplo, el modelo Double Rainbow de Girasol se vende con trama azul, crema, oro, púrpura, azul oscuro y rojo.
previously loved: portabebés queridos y, obviamente, usados. La mayoría de las veces se envían limpios y en perfecto estado (un hilito jalado es aceptable y frecuente), pero nunca falta una mala experiencia: manchas de dudosa procedencia, hilos rotos, olores extraños o pelos de gato.

HTF (hard to find): difícil de encontrar
ETF: fácil de encontrar
ITF: imposible de conseguir
HSA: altamente buscado
ISO: en busca de (I'm ISO...)
DISO: en desesperada búsqueda de
FSOT: en venta o para intercambio
MV: valor en el mercado
TV: valor de intercambio
RV: valor en tienda
BNIB o BNIP: nuevo en caja o en bolsa

Si tienes duda de algún término o te gustaría que incluyera otro a esta lista, no dudes en escribirme.

¿Más que una princesa?

En últimos días han circulado artículos sobre la empresa estadounidense Goldiebox y sus juguetes que ellos hacen llamar "inventos", supuestamente dirigidos a niñas que no quieren jugar a las muñecas y a las princesas. La propuesta, que incluye cajas con bloques, ejes, ruedas y otras piezas de construcción e ingeniería mecánica, ha sido motivo de controversia porque, comenzando por un pegajoso pero cuestionable comercial ambientado por la famosa canción Girls! de Beastie Boys, tiene el mismo corte mercadológico y de cultura de género de los juguetes que aparentemente critica. 

¡Podrías ser tú! Presenta tu idea

Creo que es muy válido promover la igualdad de género en las cuestiones lúdicas; es decir, no venderle a los niños estereotipos socialmente masculinos; ni a las niñas juguetes socialmente feminizados. Sin embargo, cuando estamos en algún supermercado o en alguna juguetería, dejo que mis hijos caminen, se detengan no diez, sino mil veces a observar y tocar. Permito que ellos decidan qué les gusta y llama la atención. Poco comento. Si muestran especial interés por algún juguete y está en nuestros planes comprarlo (y el presupuesto familiar), pueden llevarlo a casa. Hasta la fecha no se ha presentado el caso, pero ni las pistolas, los cuchillos ni otros objetos bélicos similares son bienvenidos. 

Así que, salvo por todo aquello que promueva la violencia, nunca permitiría avergonzar o criticar a mi hija porque le gustan las princesas o las Barbies o porque insiste en vestir todos los días su falda de Hello Kitty. De igual forma, J es totalmente libre de abrazar a su "bebé" y traerlo cargado por toda la casa o de elegir a Cenicienta para que lo acompañe durante nuestro día de compras. Y esto a la inversa, por supuesto. Aquí los juguetes son comunitarios.

Por desgracia, los estereotipos que inculcamos son otro tema. A mí me queda la tarea de hacer más consciente los mensajes que transmito a mis hijos. De hecho, me conflictúan más las críticas a los gustos ajenos, las miras de desapruebo, las burlas y los comentarios inquisitivos contra el otro, que un "invento" mal pensado.

¿Tú qué opinas?


21.11.13

Tareas

Han de saber que las tareas de M son orales. Por política de la escuela, no hay agenda ni papelito alguno donde conste qué deben hacer los chamacos:

- M, ¿qué te mandaron de tarea? 
- Naya, mamita. 
- ¿Segura? Hay una hoja en tu portafolio. Acuérdate, Chapis. 
- Naya, mamita. 
- Bueno, comemos y al ratito me dices. 

(Una hora después) 
- Chapis, ya vamos a hacer la tarea. ¿Ya te acordaste? 
- Sí, mamita. Peyar cinco cosas blue y cinco tayitas feíces. 
- Ok, pegar cinco cosas azules (tu tarea es de V, mi amor) y del otro lado, ¿hacer cinco caras felices? ¿Segura? ¿Quieres que le hable a la mamá de S? 
- No, mamita. 
- Bueno, vamos a recortar. 

Por supuesto al otro día, regresaron la hojita con el tradicional sello de REVISADO y una nota al calce: Objetos suaves y rasposos. Chistosita la niña.


Sobre la FILIJ y las peripecias para llegar a Tlalpan

Domingo 7 am: ¡Vamos a la FILIJ! Voy a busar horarios y el mapa porque ya no recuerdo cómo se llega al CENART. Fui hace ya varios años con L, pero ni canija idea de cómo llegar. Según mi papá, por Mixcoac, José Rico y quién sabe qué más. En fin. Qué abren a las 10. Ya revisé Google Maps. ¡Cualquier cosa! ¡Se ve fácil! ¿Te acuerdas como llegar al Azteca? ¡Pos por ahí! Voy a meterme a bañar. ¿Qué quieren desayunar! ¡Sale! Chilaquiles y huevito. Piece of cake! ¿Quedaron buenos? ¡Qué bueno que te gustaron! ¿Quieren ver videos de la Galinha? Ahí te los dejo, flaco. Voy a bañarme. ¡Chispas! Encendí la lavadora y no sale agua, ¡me lleva! Ahorita sale. ¡Ya está saliendo! No me tardo. ¿Me ayudas a vestir a los niños mientras? ¡Vámonos! Ya guardé el mapa en el iTouch. Hay que pasar por dinero al banco o sacar del Sumesa. No manches, olvidé transferir fondos y no tenemos más que 500 pesos disponibles. ¡Chale! 100 para gasolina, un libro y un refresco. Ni modo. Todo Peri hasta Mixcoac. ¿Luego? Revisa el mapa. ¡Chale! Pregúntale al don. Ok, todo derecho hasta el puente. ¿Era por abajo o por arriba? Ya nos perdimos. Pregúntale a la doña. Ok, a la derecha y en la calle ancha, nos estacionamos. Cruzar el puente peatonal y caminar al CENART. ¡Ándale pues, acerco el coche! ¡Era a la izquierda! Chale, otra vez vamos mal. ¿Y si me voy derecho para salir por atrás? Pregúntale al don. Ok, ya salimos a la calle donde debíamos estacionarmos. ¡Ándale pues, acerco el coche! ¿Y si no hay estacionamiento? Mmmhh, bueno. Ya me cansé. Urge comprar una Guía Roji. O un GPS, lo que sea. Inche Tlalpan, está a vuelta de rueda. ¿Estacionamiento lleno? ¡No manches! Ok, seguir la fila hasta el siguiente. ¿Lleno también? Ya tengo hambre. ¿Si nos regresamos o vamos a otro lado? ¡Sale, al camellón de la casa!

20.11.13

Fulares a rayas (sarga cruzada)

Es muy común que el primer fular que las familias porteadoras adquieran sea a rayas, los cuales pertenecen a la categoría de sarga cruzada o cross twill, que no es más que un tipo de tejido plano con cierta elasticidad diagonal característica de los fulares de colores lisos y rayados. Suelen ser de algodón y de colores vistosos. Son ideales para principiantes ya que se deslizan con facilidad aunque la poca textura que ofrecen también los convierte en excelentes shorties (fulares cortos) y permiten ajustar con precisión hilo por hilo o color por color.

Muchas marcas ofrecen fulares rayados como Didymos y su línea "Stripes", que son resistentes, térmicos (ideal para cualquier tipo de clima) y suaves (la doma toma muy poco tiempo). Tienen un peso bajo (alrededor de 200 g/m2) y son muy fáciles de cuidar. Algunos ejemplos de Didymos rayados son Eva, Iris, Jan, Lena, Katja, Lisa, Simon y el reciente Cleo, por citar algunos. Se pueden adquirir directamente en su página en tallas que van desde los 2.2 metros (talla 1) hasta los 5.7 metros (talla 8).

La marca francesa Neobulle también cuenta con un amplio surtido de fulares rayados como Simon, Julie, Manon Rouge, Margot o Louis. Aunque se terminan suavizando hermosamente, son fulares que requieren más tiempo de doma, pero son reconocidos por su rentabilidad: bajo costo y excelente calidad. También se caracterizan por brindar gran soporte al cargar a niños grandecitos, por lo que su ciclo de servicio abarca desde recién nacidos hasta que el cuerpo nos permita portear. Puedes adquirirlos directamente en su tienda en Francia, aunque el envío es más caro que si lo compras en Kangura, Slingomama, Secretos de bebé o incluso con nuestra colega del porteo, Patricia Soriano.

Girasol Amitola
Una marca que "se cuece aparte" es Girasol, que, aunque es una empresa alemana, su producción se lleva a cabo en Guatemala a través de una cooperativa de tejedores de la región. Son fulares tejidos a mano con hilos de algodón, muy vistosos y realmente bonitos. Por desgracia, en ocasiones su calidad decepciona y desmerece, pero no dejan de ser una opción buena para portear. Lo principal es que te guste lo que compras. De Girasol es bien conocido el Double Rainbow o RR, Donau, Romantique, Glacé, etc. Muchos modelos son HTF (hard to find o difíciles de encontrar), otros son altamente buscados (HSA o highly sought after); muchos otros son ediciones limitadas o exclusivas de determinadas tiendas o grupos de porteo, pero puedes encontrar varios de ellos en Slingomama, PaxBaby, Purple Elm Baby, Wear A Baby, Patricia Soriano en México o directo desde su tienda.

Hoppediz (Timbuktu), EllaRoo (Christine), Ellevill (línea Zara y Jade), Natibaby (Avocado), Little Frog, La Pouche a Kangarou, Vatanai (Maruyama, Kipawa), Pavo Textiles (línea Pavo Form), Oscha (Phaise Escalus), Storchenwiege (Inka), BB Slen (Pineapple), Easycare (Rainbow #1), etcétera son muchas de las otras marcas que cuentan con modelos rayados a precios asequibles, a excepción de Pavo Textiles, que es más bien una marca high end, pero de una calidad increíble.

El ancho del fular, ¿importa?

¿Es verdaderamente importante? ¿Es un valor agregado? ¿Determina la calidad de un fular con respecto a otro? En el mercado de los fulares rígidos de estilo alemán, el ancho de los fulares oscila entre 60 y 80 centímetros. Cuando estamos en la búsqueda del fular ideal, nos encontramos con la interrogante “¿qué tan ancho debe ser?”.

A veces como consumidores pensamos que cuanto más nos dén, mayor es el valor del producto que estamos comprando. En el caso de los fulares rígidos, sin embargo, existen varios motivos por los que los fabricantes deciden ofrecer distintos anchos. El principal se relaciona directamente con la edad del bebé; es decir, es muy distinto envolver a un pequeño de apenas unos días que a un chamaco que raya en los dos años y medio. En otras palabras, con un recién nacido, buscamos poca tela; que el bebé no se pierda entre los 80 cm del fular hermoso pero aparatoso y que podamos maniobrar con facilidad y gracia nuestro cargador al tiempo que garantizamos la seguridad del pequeño durante el proceso de entamalamiento. Por el contrario, con los bebés medianos y grandes, cuya fuerza móvil es mayor y, obviamente, su cuerpo ha crecido, como porteadoras deseamos cubrir por lo menos desde las axilas hasta las rodillas logrando un asiento profundo y cómodo.

Fular Didymos Aare: ejemplo de ancho estándar


Así pues, si nuestra pretensión es hacernos de un solo fular que nos sirva durante tres años aproximadamente (con suerte uno o dos años más) para cargar a nuestro chiquito, lo aconsejable sería optar por un ancho estándar de 60 cm. Cabe mencionar que muchos fulares tienden a ceder después del uso tanto vertical como horizontalmente, con lo que ganamos unos 5 a 10 cm de tela. Si, en cambio, atenderemos a otros factores como clima, preferencia en amarres, longitud necesaria, colores, tejidos, qué-sé-yo, y nos haremos de varios fulares, podríamos adquirir un fular angosto para los primeros meses de vida del cangurito y uno más ancho que responda para cuando el bebé ya haya crecido.

Diva Milano Merletti Turchesse: fular bastante ancho ¡y bonito!

Para darnos una idea, hay modelos de la marca alemana Didymos, como el Aqua Waves o Green Millefiori, que son angostos (60 cm) e ideales para enrebozar a los más pequeñitos; o bien, fulares tan angostos como los franceses Neobulle, algunos modelos de Hoppediz o los Diva Milano que rayan en los 80 cm.

En conclusión, el ancho ideal lo determinan nuestras necesidades de porteo y el crecimiento del bebé porteado. En todo caso, como lo mencioné anteriormente, un ancho estándar de 60 ó 70 cm podría ser la solución en términos prácticos.

Foros sobre babywearing

Si te gusta empaparte de la jerga y los pormenores del porteo; si lo tuyo es investigar y conocer detalles, pesos (gr/m2), colores, precios, medidas, tejidos, costuras, etc.; si te encanta preguntar, comprar trapos, curiosear, intercambiar opiniones o simplemente navegar en temas de porteo, ¿por qué no abrir tu cuenta en un foro de babywearing?

En el mundo del porteo, existen muchos foros de discusión, difusión y compra/venta/intercambio de fulares y otros cargadores. En mi opinión y experiencia, los más populares son The Babywearer (Estados Unidos), Natural Mamas (Reino Unido) y Red Canguro (España). Aunque también existen sitios de Malasia (Malaysian Babywearers), Australia, Polonia, Alemania (SuT o stillen-und-tragen), por citar algunos.

De lo que se trata básicamente es de abrir una cuenta y participar en los llamados threads, que son una fuente inagotable de conocimientos. Ahí puedes comprar, vender e intercambiar fulares, bandoleras y otros portabebés siempre y cuando cumplas con un mínimo de 30 publicaciones; así como hacer preguntas sobre amarres, necesidades especiales de porteo, fulares específicos, materiales, instrucciones de cuidado, cómo arreglar un hilo jalado, cómo hacerle flequillos (fringe) a tu rebozo, cómo hacer tu propio cargador, etcétera. También, podrás encontrar tutoriales en fotos o videos; o bien, seguir una publicación mensual sobre qué fular usaste cada día y en qué situación. Para mí, The Babywearer (TBW) es un segundo hogar, una comunidad que se nutre de experiencias diarias y enriquecedoras de porteo y otros temas afines; aunque también existen secciones en las que se puede abordar cualquier inquietud de las usuarias sobre crianza, literatura, fotografía o cualquier cosa que se te ocurra. En lo personal, es mi foro preferido ya que me ha enseñado a ser respetuosa y prudente ante la diversidad de puntos de vista que ahí se exponen, y he aprendido mucho más que en cualquier otro grupo o página de Facebook. De ahí también he logrado entablar bonitas aunque lejanas amistades con personas de todas partes del mundo.

Natural Mamas es otro foro similar, cuyas usuarias son europeas principalmente. En términos prácticos, dígamos que es el equivalente a TBW en el Reino Unido. La diferencia principal radica en que los precios se manejan en euros o libras esterlinas, pero no deja de ser un lugar amigable para las geeks del babywearing.

En tercer lugar, puedes recurrir a Red Canguro, que a pesar de ser un foro hispanohablante, es el que menos me gusta (por mera cuestión personal). Aquí también puedes aprender mucho, hacer preguntas, hablar sobre experiencias personales, encontrar videos y fotos, participar en concursos, etc. Cuenta con una amplia variedad de artículos, reseñas, tutoriales y demás material para principiantes, intermedias y avanzadas. La sede se localiza en España y, al igual que los demás foros, cuenta con su propia sección de "trapicheo" donde puedes comprar, vender e intercambiar portabebés ergonómicos.

Didymos Violet/White Indio con bebé de un mes

Por último, me gustaría recomendarte varios grupos de Facebook donde también podrás empaparte del tema y swappear tus trapitos: The Babywearing Swap (grupo dedicado a la compra y venta de portabebés) y su Babywearing Swap Feedback (conjunto de álbumes de retroalimentación para usuarias del Swap); DIDYMOS Love & Appreciation (información y swap de fulares Didymos); Oscha Slings (difusión de fulares Oscha); The Pavo Society (difusión y swap de fulares Pavo Textiles); Artipoppe Slings (promoción y swap de fulares Artipoppe), High End Babywearing FSOT (swap y subastas de fulares codiciados, buscados y de alto precio); y así sucesivamente podrás encontrar grupos específicos para fulares Kokadi, Vatanai, Natibaby, por ejemplo. Y los hoy populares handwoven, como Uppymama, ETLA, Vandeloo, Mad Hatter, por mencionar unos cuantos.

Te invito a que te unas a estos grupos, aprendas y participes del apasionante mundo del porteo. Si tienes dudas, no dudes en escribirme o en recurrir a grupos de expertas como CargArte.

Cómo portear durante el embarazo

Cuando recibí la noticia de que estaba embarazada de mi segundo bebé, mi principal preocupación fue cómo atendería todas las necesidades de mi hija pequeña de apenas 10 meses al tiempo que cuidaba de las mías. El porteo definitivamente fue una gran herramienta de la que pude echar mano desde los primeros meses hasta un día antes del parto en la semana 40.

Didymos Burg Pfau de 2.8 metros como rebozo

En términos médicos, la indicación es no abusar. Si en algún momento, sientes mareos, contracciones, fatiga o alguna otra molestia, para y descansa, como con cualquier otra actividad que realizaces. Sin embargo, existen algunas recomendaciones que debes seguir al portear:

1. Usa zapatos cómodos con suela antiderrapante y con poco tacón. Evita las chanclas o los tacones altos para aumentar la seguridad y evitar caídas.

2. Opta por fulares gruesos y de buen soporte que te ayuden a compensar el peso adicional del bebé porteado. En mi experiencia, a partir del tercer mes adquirí un fular largo de 4.6 metros modelo Eva (tejido de sarga cruzada a rayas rosas y moradas) de la marca alemana Didymos y otro corto de tejido diamante (Pavos borgoña de algodón; Burgundy Pfau) porque sabía que ni un fular semielástico (menos aún uno elástico) ni un fular rígido delgado cumplirían la función de brindar suficiente soporte en los meses venideros.

3. Realiza amarres a la espalda de varias capas como la doble hamaca, el canguro reforzado o el amarre tipo Jordan (Jordan’s Back Carry). Por salud, los amarres vientre con vientre no se recomiendan. Verás que te volverás diestra y harás maestría en la materia (guiño de ojo). O bien, amarres a la cadera como el rebozo, amarre tipo Poppins o amarre tipo Hoppins. En este caso, procura que la pierna del bebé cargado se apoye ligeramente sobre tu vientre y sentar a tu cangurito entre el hueso de tu cintura y el abultamiento de la pancita; es decir, no exactamente de lado para evitar que el peso de tu bebé grande te venza.

4. Recuerda que durante estos nueve meses, el porteo será una herramienta, no una actividad que realices arduamente. Es decir, si tu bebé grande aún no camina y está acostumbrado a ser porteado, es muy probable que siga pidiéndote que lo cargues. En ese sentido, lo portearás a ratos para dormirlo, consolarlo, transportarlo del coche a la cama o al carrito del súper. En fin, verás que motivos no te faltarán.

5. Al realizar un amarre, evita presionar tu vientre. Por ejemplo, si te decides por una doble hamaca, nada más cubre tu busto. Al terminar, anuda por encima de tu vientre, por debajo del mismo, en nudo tibetano o alguna otra variante que te acomode. 

6. Mis hombros, por ejemplo, son muy delicados y debido a antecedentes de tendinitis y síndrome del túnel del carpo (condición que se presenta frecuentemente durante el embarazo), evito realizar canguros sencillos y utilizar fulares delgados. De nuevo, mi recomendación sería que distribuyas bien el fular en tus hombros (dóblalo de manera uniforme) y que evites los amarres de una sola capa como el canguro, a menos de que tu fular sea ideal para pesos grandes (mezcla de cáñamo, lana o lino; o uno grueso de algodón).

7. La bandolera o cargador de anillos es una gran opción debido a su facilidad de uso y ajuste. Además, puedes dejartela puesta todo el día y cargar a tu bebé grande cada que lo pida sin tener que quitartela. Después de todo, cargar en brazos es menos cómodo y más cansado.

8. Si vas a usar mei tai o una mochila de broches, ata las tiras o abrocha arriba o debajo del vientre; evita presionar tu pancita en todo momento. 

9. Finalmente, también puedes utilizar tu fular como faja de embarazo. Para ello, localiza la mitad y cubre tu vientre por completo, pasa ambas tiras hacia atrás y crúzalas en tu espalda por encima de tus hombros sin torcer la tela, vuelve a pasarlas hacia atrás y a cruzarlas, ata debajo del vientre o en tu espalda. Verás cómo mejorará tu postura y la faja te ayudará a cargar el peso de tu pancita y a reducir las contracciones de los últimos meses. Si tienes un rebozo corto, dóblalo varias veces en sentido horizontal, colócalo en la parte baja de tu vientre simulando una faja y ata en la espalda o cruza las tiras en tu espalda y ata al frente, si es lo suficientemente largo.


Fular como faja de embarazo

Si tienes dudas o preocupaciones, consulta a tu médico y asiste a una reunión de porteo.

¿Para qué otro blog sobre porteo?

Just because! Por la sencilla razón de que siempre me ha gustado compartir lo que aprendo. ¡Ups! Pensé que la entrada daría para más, pero no hay mucho que decir. ¿O sí? Bueno, podría hacer una extensa lista de los motivos por lo que amo el porteo, pero la dejaré para otra ocasión.

Durante una asesoría, hablando sobre mezclas de fulares

¿Quién soy?


Estudié dos años la carrera de Psicología en la UDLA cuando decidí que lo mío eran los idiomas y mi vida cambió de dirección. Me gradué como Licenciada en Traducción en el Instituto Superior de Intérpretes y Traductores (ISIT), carrera que ejerzo de manera independiente y de la que nace mi gusto por la literatura, los idiomas, el cine y el arte de la comunicación. 

En mi vida personal, tengo dos hermosos hijos (2010 y 2012, respectivamente) con quienes a diario (o casi diario) practico el babywearing o porteo: valiosa herramienta que conocí gracias a Liz Lozano, directora de la famosa marca de fulares Mami, ¡cárgame! 

Casi un año después (2011), asistí a una reunión del grupo CargArte durante un viaje de Querétaro (estado en el que radiqué año y medio) a México. Ahí conocí a Gaby Sánchez, su fundadora, y a Abrile Mijares (creadora de la única marca mexicana de mochilas ergonómicas t'üki-bügu). Durante esa reunión, Gaby me propuso co-liderar el grupo de Querétaro. Durante casi dos años, mi misión en el proyecto fue brindar asesorías, grabar videos para el canal de Youtube Proyecto CargArte, crear contenidos y contestar dudas de los seguidores en Facebook. 

Hoy en día, he decidido abrir mi propio espacio para hablar principalmente sobre esta pasión y muchos otros temas de mi interés. Me especializo en la evaluación de portabebés del mercado europeo y estadounidense, ya que la vida me ha sonreído y he podido "jugar" con más de 80 fulares de distintas marcas, mezclas, tejidos, colores y sabores. Si necesitas ayuda para elegir el fular adecuado a tus necesidades, puedo ser de gran ayuda. 

Creo que toda idea es inherentemente de dominio público, pero mi tiempo, esfuerzo y sueño me han costado tejer este blog; por lo que te pido que reconozas mi autoría y cites toda información que de aquí extraigas.

¡Gracias!